jueves

Usted

Todavia no nos conocemos y ya me emocionas, no sé si tenga sentido, no lo sé, lo más seguro es que no, pero así soy yo, lo más seguro es que cuando llegues te oculte este desvarío para que no sepas que te esperaba, o tal vez te lo enseñe, para que sepas lo que espero...
¿Sabes? tengo miedo a que llegues, no sé si mis manos se acuerden de cómo conocer tu rostro con destreza, o si soportes tanta alevosía, pero quiero que vengas a llenar las noches de aventuras, a llenar mis rincones de tu luz, y me agarres de todos mis miedos para cambiarme, porque si temo, porque te imagino entrando con sigilo a esta madriguera idiota y terrorífica que construí para que no me encuentres nunca, pero te espero...
Y no tengo reglas, no sé distinguir entre lo eterno y lo efímero, no sé distinguir entre huésped e invitado, no sé distinguir a los pasajeros en tránsito, pero si  haces magia, yo me quedo, pero para eso Sr., necesitas besarme los párpados hasta que arda, necesitas bañarme en el mar de tu cuerpo pero sobre todo en las playas de la confianza, porque no tengo ninguna, pero me crecen como flores en primavera, sencilla, omnipotente, desvariada, descarnada...y por eso mucho cuidado conmigo, porque creo y cuando creo no hay viento que me separe de tu carne, pero si mi credo se quiebra, no vuelve, ya no vuelve...y te pido, te lo pido sinceramente, construye en mi mirada un laberinto interminable de pasto tierno y semillas, no me regales todos tus secretos, dosifícalos, protégeme el alma, teje mi espalda de atardeceres, acaricia despacito la ansiosa calma que nace en mi  cuello, pinta de otros colores el carmesí desconsuelo en mi sangre, y cuando el aire se pueble de carcajadas luminosas, cuando me olvide de ayeres en otros brazos, cuando renazca seré por instantes engañosamente tuya.
Yo intentaré abrir mis manos, mis ojos, mi garganta, no me es difícil prodigarme, soy un campo agreste, desierto y matices, soy revancha y silencios, soy nube a punto de llover y furia, y temo, temo no verte, porque este camino es confuso y me pierdo...
Yo te pido, porque sé que cuando estés en mi umbral, te voy a regalar secretos con olor a tiempo, y un par de sueños a todo color, y besaré tu existencia de sur a norte. Y te prometo, tener abiertas las puertas de este,  mi paraíso antisísmico (¿me harías temblar el mundo?) y panorámico  a ver si en una de esas, te gusta mirar la luna sentado a mi lado.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario