martes

Crónica de mi, sin ti.

Dualidad y sombra, tan serena y tan tormenta soy, a la siniestra hora en que el deseo se mofa en los contornos de estas piernas sin dueño, sin sueño, sin sueños...
Somos tan frágiles, personajes de un cuento agridulce, inventados con el día, asesinados en la cama donde cada noche te duermes junto a las mariposas, que un día a fuerzas de mis ocurrencias de niña, mis desaires de dama, y mis uñas de zorra, te enterré en el vientre, como mi saliva...como mi desconcierto.
Podría proponerte tantas cosas, encontrar tus manos, crear milagros, guardarme para siempre el tacto húmedo de tu boca, tu ansiedad, tu infierno; que huyamos, niño mío, de esta distancia oscura e interminable, que camines, que me manches con tus dedos, que te hundas (en mi, en mi, en mi ) en mi lecho, que me arquees con tu lengua, me reavives con tu aliento.
Y es urgente, porque la piel está quemada de impaciencia, que me llenes, amor, que me llenes todos mis orientes, que me abras, que me lamas, que me mojes de ilusiones las esperas, que me duermas con canciones la tristeza.
Es que yo, amor, casta y vampira, efímera y eterna, en este semi-presencial celo-duelo de tu cuerpo, confusa y radiante, hembra y herida, espero cada noche maniatada por las sábanas que imaginan nuestro encuentro;

...y muero y me ahogo en el abismo tan estéril , que dejaste entre mi ombligo y mi sexo...

1 comentario:

  1. Un silencioso aplauso, dada la hora de la madrugada...porque lo que vos haces con las palabras,merece un sonoro, eterno ,inmensisimo aplauso..., estoy verdaderamente feliz de que me hayas invitado a pasar a este mundo de maravilla!!!!
    Gracias..., la noche es el mejor momento..., no hay duda!!!

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